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Las tensiones y contracturas musculares pueden jugar un papel importante en la aparición de las migrañas. Si alguna vez has sufrido migrañas, sabes que puede ser muy debilitante, te deja incapaz de hacer las tareas diarias y te obliga a refugiarte en un lugar tranquilo y oscuro. Como existen diversas posibles causas, a veces es agobiante saber por dónde empezar a buscar respuestas. Las migrañas  y el dolor de cabeza son unos de los motivos más frecuentes por los que las personas buscan el cuidado quiropráctico.

Las tensiones musculares y la biomecánica inadecuada pueden suponer una carga adicional para los músculos y estructuras del cuello y del cráneo. Esta pérdida de alineación puede tirar y torcer los ligamentos, suturas y músculos. Esto, a su vez, puede alterar el flujo sanguíneo adecuado en estas áreas. Uno de los mecanismos comunes de la migraña es la contracción y dilatación irregular de los vasos sanguíneos en el cerebro. Este irregular estado de circulación sanguínea puede afectar a las diversas partes del cerebro, y ahí empiezan las sensibilidades a la luz y al sonido que muchas personas experimentan con sus migrañas.

Las causas comunes de la tensión y contracción de los músculos del cuello y del cráneo son:

• Posturas inadecuadas
• Lesiones antiguas
• Columna vertebral y cuello desalineados
• Falta de biomecánica adecuada
• Aumento de los estados de estrés
• Falta de sueño y de ejercicio
• Toxicidad debida a un desequilibrio en la dieta

Debido a la gran cantidad de causas posibles que pueden estar contribuyendo a tus migrañas, se recomienda comenzar a investigar tus hábitos de estilo de vida. Pensar globalmente primero en la dieta, el estrés, las posturas, el sueño, etc. Tu quiropráctico puede ayudar a identificar las posibles causas con un examen quiropráctico completo que incluye: pruebas neurológicas, examen postural, pruebas ortopédicas y un historial completo. Puede haber más de un factor relacionado con tus episodios de migraña, por lo tanto, es importante estar atento y prestar atención a los factores desencadenantes comunes.

La alineación correcta de la columna y la biomecánica pueden tener un papel muy importante en la capacidad del cuerpo para mantener un flujo sanguíneo correcto al cerebro. Cuando el cuerpo comienza a compensar la alineación incorrecta, los ligamentos, tendones, músculos y huesos mismos comienzan a desplazarse, y a compensar por los patrones incorrectos de movimiento/postura. Esto puede causar tensión adicional y limitar el flujo sanguíneo a las áreas afectadas.

Los quiroprácticos están entrenados para localizar los lugares específicos de estrés, tensión y compensación en el cráneo, la columna vertebral y la pelvis. Los ajustes quiroprácticos son movimientos específicos y no dolorosos aplicados a estas subluxaciones (que se localizan a través de exámenes completos). Los ajustes permiten restaurar la función adecuada, el flujo y el movimiento de la sangre, el sistema linfático y los nervios. Cuando todo el cerebro y el cuerpo pueden comunicarse adecuadamente, pueden mantener a toda la persona en un estado de salud equilibrado: en homeostasis.

Cuando el cuerpo está correctamente alineado, no está luchando contra sí mismo para realizar sus necesidades básicas, como mantenerse contra la fuerza de gravedad. Esto, a su vez, permite que los músculos de la cabeza, el cuello y el cuerpo funcionen correctamente y evita las contracturas debidas a las compensaciones que el cuerpo tiene que realizar. Cuando los músculos situados alrededor de la cabeza y el cuello se relajan, hay más capacidad para que los vasos sanguíneos se contraigan y dilaten correctamente.

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