- Aumentamos nuestra conciencia si realmente solo comemos cuando tenemos hambre.
- Masticar despacio y hacer pausas durante la comida, nos ayuda a digerir mejor.
- El entorno es importante: un lugar tranquilo y agradable, una mesa bien puesta, buena compañía… Hay que cuidar qué comemos, cómo comemos y dónde lo hacemos.
- Intentar dejar de comer antes de sentirse lleno.
- Estar atento al momento y no comer si no se está disfrutando de la comida, tampoco si estás enfadado o ansioso.
- Recomendable beber agua en pequeñas cantidades durante las comidas, los líquidos diluyen los jugos gástricos y dificultan la digestión. En cambio bebe abundante agua entre comidas.
- Agradezcamos el plato que tenemos delante y también al cocinero/a que ha invertido tiempo y amor en realizarlo.
Reserva tu cita para un estudio quiropráctico completo
]]>]]>